6-3, 7-6, 6-3. Ese fue el resultado con el que Alexander Zverev batió a Rafa Nadal en la Philippe Chatrier, colocándose junto a Soderling y a Djokovic en la lista de los tenistas capaces de lograr una de las mayores gestas en el tenis. Ganar a Rafa Nadal en Roland Garros.

Cuesta asimilarlo. Al fin y al cabo, sean cuales sean las circunstancias actuales, hasta ayer sólo habíamos visto perder a Rafa 3 veces en 115 partidos en las pistas de Roland Garros.

Un dato que mientras escribes o repasas parece que lleve trampa. ¿Cómo puedes salir tantas veces vencedor en un torneo y en una superficie que reúne cada año a las mejores raquetas? Y, aunque se pase muchas veces por alto, en 109 de sus 112 victorias no necesitó llegar al quinto set.

Una de las principales razones por las que Rafa había decidido no colgar la raqueta todavía era por esa motivación que tenía por verse, mínimo, una vez más en el torneo que mejor resume lo que ha sido su carrera.

Se había ganado darse una oportunidad más y sólo la presentación de las ¡14! veces que ha ganado y la sensación del público de estar ante un partido propio de rondas finales ya nos hacia comprobar que en pista estaba un jugador cuyos números hace tiempo se alejaron de la lógica y del que, aunque pasen los años, se seguirá hablando con admiración.

Ayer, durante ciertos compases del partido nos llevó a creer una vez más. A pesar de que enfrente estaba el jugador más en forma del circuito y uno de los máximos candidatos al título, Rafa, que en dos años ha jugado apenas un puñado de partidos, demostró, tanto al público como a él mismo, que no estaba tan lejos. Es difícil no ilusionarse pensando qué hubiese supuesto empatar el partido a 1 set.

Ahora, Rafa no cierra la puerta a intentarlo una vez más en la edición de 2025. Sólo el físico y su juego nos confirmarán si ese sueño se convierte en realidad pero no hay mejor homenaje que dejar una puerta abierta a la esperanza y sentir que quizás nos falta por vivir algún momento más suyo en Roland Garros.

El tiempo pondrá en perspectiva lo de Rafa Nadal en Roland Garros. Ganar 14 veces un torneo como este es un hito que trasciende del tenis. Es difícil imaginar una hazaña deportiva que pueda mirar a los ojos a esta y siempre podremos presumir de no necesitar vídeos para corroborar una historia que hemos podido vivir y disfrutar con nuestros propios ojos durante 20 años.

Rafa, te has ganado el derecho a hacer lo que consideres. Y, una última cosa, tus seguidores ya hemos marcado en rojo las fechas de la cita olímpica. Alzarse con una medalla en la pista Philippe Chatrier es su último gran reto y, por qué no, el mejor broche posible para una carrera legendaria.